How to cite: Jiménez Ortiz, Nadia Alejandra, José Luis Santillán Sánchez, Israel Molas Narvaez, Jesús Lozano Paredes, Nisaguie Abril Flores Cruz, Lucio Leyva Cruz y Miguel Mireles Ramírez. ‘Construyendo comunidades interculturales desde la solidaridad’. Culture Caleidoscoop 2 (2024). DOI 10.57031/culcal.v2i1.18152
Procesos organizativos interculturales
'Un mundo donde quepan muchos mundos' UNA DECLARACIÓN… POR LA VIDA,1 - EZLN 2021, Chiapas, Mexico.
En septiembre de 2014, un grupo de jóvenes activistas indígenas y mestizos se unieron para crear Radio Zapata 94.1 FM, una radio comunitaria ubicada en la región de la montaña baja de Guerrero, México. ¿Su objetivo? Ejercer en la vía de los hechos el derecho de los pueblos indígenas Mhee Phaa, Tun Savi, Nahua y Ñomndaa a la libre expresión y al resguardo de su identidad y cultura. Esta experiencia aconteció como parte de una iniciativa más amplia encaminada a la autonomía y libre determinación, en un contexto de niveles de violencia sin precedentes como resultado del conflicto generado por el crimen organizado, el sector privado y el gobierno mexicano . Más allá de la promoción del patrimonio cultural y lingüístico de los pueblos, la radio comunitaria desempeñó un papel crucial al permitir la producción y difusión de noticias precisas y actualizadas, así como contenido desarrollado por y para los pueblos indígenas.
Radio Zapata es una de las 19 radios comunitarias dirigidas por promotoras y promotores indígenas, que han nacido gracias a la colaboración del Centro de Investigación en Comunicación Comunitaria A.C. (CICC por sus siglas en español), una ONG mexicana fundada en 2016 por los mismos jóvenes que en 2014 estuvieron hombro con hombro con los pueblos indígenas de Guerrero. Al día de hoy, quienes formamos parte del CICC somos hombres y mayoritariamente mujeres. Somos jóvenes del pueblo nahua, amuzgo, mestizo y de centroamérica. También somos migrantes, estudiantes, madres, militantes y trabajadoras de formación multidisciplinaria (antropólogas, sociólogas, museólogas, comunicólogas y ingenieras). Somos múltiples culturas que nos dan identidad, atravesadas por diversos privilegios pero también por discriminaciones de clase, de género y de raza. Nos encontramos en la urbe; en este territorio donde se despliega todo un sistema colonizador que busca homogeneizar las formas y los fondos a favor del capital. Entre esta diversidad, lo que nos une es la convicción de que otro mundo es posible, un mundo donde quepan muchos mundos, como dicen las y los zapatistas.
Para quienes somos parte del CICC, este compromiso político y de vida establece el punto de inflexión que perfila el tipo de trabajo que realizamos. Este lo definimos como una forma de acompañamiento a los procesos de lucha, resistencia y construcción de vida digna de las comunidades y organizaciones indígenas en México, y tiene como base tres elementos: la solidaridad organizada con sentido militante, el acompañamiento de largo plazo y la construcción de relaciones horizontales entre compañeras y compañeros de lucha.
Cuando hablamos de solidaridad organizada, nos referimos al compromiso consciente de accionar de manera colectiva, las voluntades individuales de colaboración a una causa determinada. Cualquier persona puede ser solidaria pero lo que hacemos en el CICC es organizar nuestras solidaridades para responder a las necesidades y problemáticas puntuales que las organizaciones comunitarias nos expresan, y no a las que cada unx de nosotrxs puede imaginar que son importantes. Decimos con sentido militante porque no es una solidaridad dirigida de forma aleatoria a cualquier causa social, ambiental o de alguna otra índole. Hablamos de una solidaridad que apunta de manera explícita y comprometida, al fortalecimiento de los pueblos que están construyendo autonomías y que buscan construir proyectos de vida alternativos de lo que ofrece el sistema capitalista.
La forma de ejercer esta solidaridad es a través de procesos de acompañamiento de largo plazo a las y los compañeros de las organizaciones de base. Acompañar significa que los pueblos definen los procesos, las necesidades y las problemáticas que les resultan prioritarias, y el CICC aporta herramientas, soporte y métodos que permita la apropiación y adaptación de dichos instrumentos a sus marcos de lucha y construcción autónoma. Hablamos de compañeros porque en este ejercicio tejemos alianzas y construimos relaciones entre pares, no relaciones asistenciales o de ayuda al “necesitado”, sino de colaboración y escucha mutua por un fin común.
Cada territorio demanda la construcción de estrategias de acompañamiento particulares por lo cual en la práctica este ejercicio adquiere muchas formas. Algunas son el respeto y participación como escucha en procesos asamblearios, respuestas a las demandas específicas de los pueblos, desarrollo de acciones directas en solidaridad con las luchas comunitarias, fortalecimiento de lazos y construcción de relaciones entre pueblos y luchas, entre otros.
Pueblos en resistencia
Este tipo de colaboración sólo ha sido posible gracias al objetivo común que nos hermana con las organizaciones y comunidades de base que acompañamos. Este objetivo es la construcción de autonomías.
El primero de enero de 1994, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) integrado por los pueblos indígenas de Chiapas, México, declaran la guerra al gobierno mexicano ante la situación de explotación, abandono y marginación extrema en la que los mantenían los poderes caciquiles de la región y la aquiescencia del gobierno federal. El movimiento social que se gestó a partir de este levantamiento, resultó uno de los más importantes e influyentes en nuestra nación en los últimos 30 años, no solo por las demandas exigidas – trabajo, tierra, techo, alimentación, salud, educación, independencia, libertad, democracia, justicia y paz – , sino sobre todo porque se convierte en el emblema del movimiento indígena transnacional, del movimiento altermundista, del movimiento anticapitalista y antiglobalización y del movimiento proautonomía en otras muchas regiones del mundo.3
En los mismos años surgió en toda Latinoamérica, expresiones autonómicas que buscaban implementar el Convenio 169 de la OIT (Organización Internacional del Trabajo) que reconoce los derechos colectivos de los pueblos, pero por fuera de la intervención y regulación de los Estados. Como señala Raul Zibechi, “en este período de caos sistémico y crisis civilizatoria, estas autonomías se están convirtiendo en alternativa de vida y en referencias políticas en todos los sectores sociales”.4 Por ello el CICC, como organización de la sociedad civil, decidimos deforma conciente fortalecer estos procesos reales que muestran que la creación de mundos nuevos no pasa por la aceptación y validación de las instituciones estatales, sino por la capacidad de desplegar las potencias autonómicas que anidan en todos los pueblos.5 Para nosotros, fortalecer estos procesos es la solidaridad en práctica y contribuye a construir vida digna en el territorio intercultural que habitamos.
Aún queda mucho por hacer. A casi 30 años del levantamiento zapatista, de los aproximadamente 12 millones de indígenas en México (10 por ciento de la población total), el 69.5 por ciento aun se encuentra en situación de pobreza, es decir unos 8 millones 340 mil de personas.6 Quienes además, siguen padeciendo discriminación, imposición de megaproyectos y desplazamiento forzado a manos del Estado y del crimen organizado. Los procesos de acumulación por desposesión se intensifican en todos los territorios por lo cual suscribimos más que nunca que la lucha por la humanidad es mundial, que la lucha es por la vida.7
La práctica solidaria en el trabajo comunitario
Desde el CICC colaboramos en una diversidad de áreas: apropiación tecnológica para radios comunitarias, cine comunitario, economías autogestivas, revitalización lingüística, revalorización y resignificación de las expresiones culturales y documentación de violaciones a derechos humanos. Sin embargo, solo el área de apropiación tecnológica, economías autogestivas y revalorización y resignificación de las expresiones culturales han recibido subvención de fundaciones y donantes. Durante estos siete años, el resto de las áreas han operado en distintos grados y momentos con recursos propios de quienes integramos el CICC. Algunas veces de forma articulada con los proyectos que sí tienen fondos. Otras al margen de estos y por lo tanto con tiempos de dedicación y recursos adicionales.
De igual forma, cada organización de base define las pautas de colaboración según sus tiempos y calendarios. Parte de nuestra tarea es adaptar las propuestas de subvención a estos tiempos respetando los plazos estipulados por las fundaciones y donantes. De ahí que las propuestas de subvención suelen abarcar solo una fracción del tiempo realmente destinado al acompañamiento del proceso de fortalecimiento de las organizaciones y comunidades. Aquí es donde se expresa en mayor grado el trabajo militante y solidario que realizamos quienes formamos parte del CICC. Y a pesar de los retos que esto implica en términos de sostenibilidad financiera y laboral de la organización, sabemos que es la única forma de contribuir realmente en los procesos de largo plazo.
Nos agrada trabajar con el CICC, porque vemos el compromiso con nosotros. No solo nos dejan el equipo y ahí háganse bolas, sino que nos asesoran con paciencia y también podemos hacer consultas después de terminados los proyectos, osea que es una asesoría permanente, podría decirse así y eso es muy importante para avanzar. - Israel Molas Narvaez. Radio Comunitaria Puksi’ Ik’Al’ Ha’, Campeche, México
En las siguientes líneas relatamos dos procesos puntuales para compartir algunos de los retos que conlleva el trabajo solidario con y entre organizaciones hermanas ubicadas en los márgenes de la racionalidad hegemónica, pero al mismo tiempo, dependientes de esta en diversos sentidos. Armando Bartra se refiere a ello como exterioridad relativa, una exterioridad que permite pensar un futuro distinto del que el sistema nos impone.8 Las y los zapatistas hablan de un muro que divide a unos de otros, donde hay un arriba y un abajo, y que los que están arriba están ahí porque los sostienen los que están abajo, pero el gran peso de este, ha hecho que se haga una gran grieta en el muro.9 También dicen que el muro no siempre estuvo ahí, que saben cómo se levantó, su funcionamiento y cómo destruirlo. Saben que lo importante ahorita, es hacerle una grieta para mirar e imaginar todo lo que se podrá hacer mañana.10
Teóricos como John Holloway, Ana Esther Ceceña, Armando Bartra, Gustavo Esteva, entre otros,11 han retomado este método de análisis como una guía para leer las nuevas luchas sociales,12 como movimientos de negación-y-creación de un hacer alternativo que busca crear su sentido o significado a través de un proceso consciente y colectivo.13 Desde el CICC nos sumamos a ello, y la pregunta permanente que resulta es ¿lo que estamos haciendo, abre grietas en el muro? La respuesta no es nada simple, es un tema que nos demanda una reflexión permanente ante el hecho de navegar, como organización legalmente constituida de la sociedad civil, entre instituciones con objetivos muy diferentes a este y proceso de institucionalización que requerimos implementar para sostenernos económicamente. Con los siguientes casos esperamos ilustrar un poco esta realidad.
Apropiación tecnológica para radios comunitarias
Para nosotras, nosotros, zapatistas, las artes son una esperanza de humanidad, no una célula militante. Pensamos sí, que es en los momentos más difíciles, cuando es más la desilusión y la impotencia, que las artes son las únicas capaces de celebrar la humanidad.14 - EL FESTIVAL CompARTE Y LA SOLIDARIDAD. Subcomandante Insurgente Moisés. Subcomandante Insurgente Galeano. México, julio del 2016
De 2014 a la fecha hemos acompañado la creación de 19 estaciones de radio autogestionadas por organizaciones indígenas y otros proyectos creativos de participación comunitaria en 18 comunidades indígenas del país. En todos los casos, el resguardo, la revitalización y la resignificación de la cultura y sus expresiones ha jugado un papel fundamental en el sostenimiento de los proyectos. Desde la experiencia del CICC ha sido evidente, como dicen las y los zapatistas, que “cuando es más la desilusión y la impotencia, las artes son las únicas capaces de celebrar la humanidad”.15
Un caso emblemático es el de “Radio Tlanixco, manantial de libertad”.16 Entre 2015 y 2019 acompañamos al movimiento por la libertad de la y los presos de San Pedro Tlanixco en el nacimiento de su radio comunitaria. Esta comunidad Nahua ubicada a las faldas del Nevado de Toluca en el Estado de México, llevaba más de 15 años en lucha por la liberación de una compañera y seis compañeros presos políticos, acusados sin prueba alguna por el gobierno estatal, de asesinar al representante de las empresas florícolas trasnacionales que venían robando el agua y privatizando los manantiales ubicados en la comunidad de San Pedro Tlanixco. En represalia a la comunidad durante dos años se realizaron cateos nocturnos al margen de la legalidad, como estrategia de terror para obligarles a desistir de la lucha por el agua y la liberación de sus compañeros. Se les acusó públicamente de pueblo terrorista y se emitieron órdenes de aprehensión para todas y todos los representantes de la Junta del Agua.
En 2016 nace Radio Tlanixco con el objetivo de informar a la población sobre la situación de la y los compañeros presos e invitar a la población a perder el miedo y salir a las calles nuevamente. La aceptación de la radio por parte de la comunidad fue inmediata, la participación del pueblo en los eventos públicos incrementó y la solidaridad nacional e internacional se hizo presente en el territorio. Todos los años desde su nacimiento se llevó a cabo un festival de arte y música durante los aniversarios de la radio. Asistían colectivos de diversas regiones y países, para compartir experiencias de lucha, exigir la liberación de la y los compañeros presos y para escuchar la palabra del Movimiento y la gente de la comunidad. Se compartía música, baile, poesía, artes gráficas. Se celebraba la vida y se luchaba por la libertad.
El eco mediático que generó la radio y las organizaciones que acompañaron el proceso logró que la ONU pusiera los ojos en el caso y emitiera una recomendación al Gobierno de México para liberar a la y los compañeros presos, lo cual se materializó en 2019.17
La aportación del CICC en este caso inició con la participación en diálogos con el movimiento para conocer y dimensionar la problemática, compartir la experiencia de otras radios comunitarias como herramientas de lucha para distintos fines como son la defensa del territorio, la revitalización de la cultura y en este caso, la exigencia de la liberación de la compañera y compañeros presos políticos. Una vez que el movimiento decidió crear la radio, participamos en la adquisición e instalación del equipo de transmisión y producción radiofónica, en la capacitación para la locución, producción, programación, edición de audio, investigación comunitaria y mantenimiento del equipo. Acompañamos los ejercicios de apropiación de todas estas herramientas y reforzamos los elementos que resultaban necesarios.
El compromiso y la necesidad por liberar a la y los compañeros era grande y sentida, por ello también nos involucramos en la planeación y desarrollo de los festivales de aniversario de la radio, en la implementación de campañas de recaudación de fondos para cubrir gastos del proceso legal y participamos en acciones directas como marchas fuera del Penal de Santiaguito, Edo de México, donde se encontraban los compañeros. En términos de la construcción de alianzas, desde la solidaridad internacional impulsamos el encuentro entre las y los compañeros del movimiento con organizaciones de otras geografías como LAG (Latin-Amerikagruppene)18 de Noruega, quienes jugaron un papel importante en la difusión de la lucha de los compañeros en Europa.
Cada radio tiene su historia de lucha, resistencia y reafirmación de su cultura, y esta se constituye en una herramienta no por que el CICC lo diga, sino porque las organizaciones lo visualizan de esa forma. Nosotros nos sumamos a esa resistencia y contribuimos desde nuestras capacidades a que las comunidades se apropien de ellas y generen la confianza necesaria para utilizarlas.
El Movimiento por la Libertad de las y los Presos de San Pedro Tlanixco logró su objetivo, sin embargo seguimos trabajando con quienes lo integraron y otros actores en el territorio porque los problemas de despojo y violencia han incrementado. Después de la liberación de los compañeros el Estado quiso apropiarse de la lucha por su libertad invisibilizando el rol fundamental que jugó el Movimiento durante 10 años de resistencia. En respuesta a ello y en consenso con la organización, desde el CICC (y a la petición de la comunidad) iniciamos la producción de un documental que narra la lucha del Movimiento y todas las injusticias y violaciones a derechos humanos que se ejercieron en contra de la comunidad de San Pedro Tlanixco, la y los presos políticos, y quienes integraron el Movimiento por la Libertad.
Este es solo un caso que se replica con sus particularidades en cada territorio en los que trabajamos. El valor de los fondos inyectados a estas actividades es ínfimo en comparación con el valor de la solidaridad nacional, internacional, organizativa y de individuos que se ha venido tejiendo en torno a esta causa. Solidaridad a la cual el CICC se suma a partir de nuestras propias formas y modos.
Nidos Culturales, incubadora de emprendimientos artísticos para creadores indígenas
Es nuestra creencia que la posibilidad de un mundo mejor (no perfecto ni acabado, dejemos eso para los dogmas religiosos y políticos) está fuera dela máquina y su posibilidad se sostiene en un trípode ... las artes, las ciencias y los pueblos originarios con los sótanos de la humanidad. He puesto “las artes” porque son ellas (y no la política) quienes cavan en lo más profundo del ser humano y rescatan su esencia. Como si el mundo siguiera siendo el mismo, pero con ellas y por ellas pudiéramos encontrar la posibilidad humana entre tantos engranajes, tuercas y resortes rechinando con mal humor. A diferencia de la política, el arte entonces no trata de reajustar o arreglar la máquina. Hace, en cambio, algo más subversivo e inquietante: muestra la posibilidad de otro mundo.19 - Las artes, las ciencias, los pueblos originarios y los sótanos del mundo. Subcomandante Insurgente Galeano. México, febrero del 2016.
Una necesidad constante en las comunidades es el acceso a fuentes de trabajo. Nosotros agregamos trabajo digno, porque son muchas las actividades productivas que realizan la gente de las comunidades, pero las cadenas económicas a las cuales están conectadas estas actividades, las constituyen en trabajo explotado, mal pagado y muchas veces riesgoso. Como mencionamos anteriormente, el arte y la cultura se expresan de manera permanente y bajo diferentes formatos en todos los territorios y proyectos que realizamos, y se imbrican de una forma agridulce con los problemas y necesidades latentes en cada lugar.
En 2021 se presentó la oportunidad de construir un proyecto con las comunidades, que conjuntara ambos elementos; la generación de trabajo digno y la promoción y revitalización de las culturas comunitarias. En este marco, nos propusimos trabajar con seis comunidades de tres estados de la república; Oaxaca, Guerrero y Estado de México; para construir, a partir de un modelo de incubación especialmente diseñado para funcionar en estos contextos, cooperativas culturales.20 Son seis las expresiones culturales que se despliegan en el marco de los Nidos. Participan dos proyectos de artes visuales, específicamente serigrafía, un proyecto editorial, un proyecto de producción audiovisual, un proyecto de diseño textil y un proyecto de pintura tradicional de amate.
Todo el acompañamiento ha sido completamente personalizado y adecuado a cada territorio. Respondiendo a los pueblos, cada cooperativa eligió el área artística en la cual se desarrollaría, incluyendo algunas áreas que las y los propios integrantes de la comunidad no dominaban. Este fue el caso particular de los Nidos de serigrafía, lo cual implicó un gran reto porque tuvimos que integrar nuevos compañeros especialistas en el área. En este sentido, el proceso de fortalecimiento de capacidades ha exigido ir más allá del programa pedagógico para la autogestión, comunicación y mercadeo, áreas de formación inicialmente definidas. Gran porcentaje de esta labor se ha realizado de forma solidaria por compañeras y compañeros de otras organizaciones que han brindado su tiempo y compartido sus conocimientos de forma voluntaria en diversos momentos de la implementación del proyecto.
También es relevante compartir algunas otras cualidades de este proceso. Todo el trabajo se realiza en las comunidades, lo cual implica trasladarse una vez al mes a cada territorio para realizar las diversas capacitaciones a partir de las necesidades identificadas en cada Nido. Para nosotrxs es importante asegurar que estamos generando espacios inclusivos, lo cual nos ha llevado a implementar mecanismos que le permita a las compañeras, sobre todo aquellas que son madres, participar en las actividades sin tener que dejar a sus hijxs en otros lados. Como hemos mencionado, los tiempos en las comunidades son otros y ello nos lleva a adaptar las jornadas de trabajo cuando la milpa, la fiesta o la asamblea acontecen. Algunos espacios de trabajo no se encuentran en condiciones óptimas para desarrollar los trabajos por lo cual colaboramos a la habilitación de estos lugares con material, mano de obra y trabajo coordinado con las y los compañeros.
[Me parece importante mencionar] el esfuerzo que hicieron los compañeros [del CICC] y el interés que tuvieron porque no es fácil interesarse por una comunidad lejana. Qué siempre nos tengan presente y que nosotros aquí seguirémos y echandole ganas a la medida de nuestras posibilidades pero siempre su ayuda será muy, pero muy importante. - Jesús Lozano, Xalitla, Guerrero.
Una situación particular es la que se presenta en las comunidades de Xalitla y Xochistlahuaca, dos Nidos ubicados en el Estado de Guerrero. El grado de violencia que azota estas comunidades es muy elevado. Durante el primer año de implementación nos vimos forzados a suspender las actividades debido a la desaparición forzada y asesinato del familiar de uno de nuestros compañeros de la organización quien vivia en una localidad aledaña. Ante esta situación, nuestro accionar ha sido mantener el diálogo con la cooperativa y evaluar continuamente la situación de riesgo. La opción para nosotros no es abandonar al grupo a menos que la cooperativa lo solicite, pues creemos que la promoción de la cultura y la posibilidad de acceso a un trabajo digno en estos territorios tan vulnerados, pueden crear grietas que permitan visualizar la construcción de otras realidades.
En octubre de 2022 se llevó a cabo el encuentro “Nidos Culturales: compartiendo saberes que transforman” donde las y los 31 compañeros que participan en el proyecto se desplazaron a la CDMX y visitaron cinco experiencias cooperativas vinculadas con las temáticas que cada Nido trabaja. Este encuentro no hubiera sido posible sin la participación solidaria de las cooperativas de la CDMX quienes abrieron las puertas de sus espacios con la intención de compartir su experiencia y conocimientos con quienes recién inician el camino para la construcción de estos proyectos comunitarios. Tampoco hubiera sido posible sin el trabajo voluntario de todo el equipo del CICC que participó en diversos momentos y tareas logísticas para que esta actividad se llevara a cabo.
Es algo que para nosotros es muy valioso ... nos abrieron muchas puertas y ya conociendo de este proyecto estamos viendo que se pueden hacer muchas cosas. [...] Hemos llevado diferentes experiencias y ellos [el CICC y otros Nidos] han aprendido de nosotros. Es algo muy chida de conocer, de intercambiar experiencias, saber qué es lo que hacen otros Nidos pues y compartir conocimientos y procesos. - Lucio Leyva, Santo Domingo Lachavito, Oaxaca
El proyecto Nidos Culturales concluye en septiembre de 2023 por lo cual aún no hemos realizado la evaluación final con las y los compañeros de las cooperativas, sin embargo, hasta ahora lo más enriquecedor para nosotros como facilitadores, ha sido atestiguar la confianza que nuestras compañeras y compañeros de las cooperativas han ido adquiriendo en torno a la producción y presentación de su obra, así como el proceso organizativo que vienen construyendo al interior de cada grupo.
[Este proyecto] ha sido parte de buscar una vida digna y lucha por eso. Y creo que más bien han fortalecido mucho los Nidos en lo que yo he vivido y yo he aprendido. En mi experiencia ha sido importante pensar y reflexionar en cómo este [proyecto] puede caminar más hacia esta vida digna que estamos buscando como comunidades. - Nisaguie, Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, México
Ya trabajando en el grupo tengo que echarle ganas y cumplir con mis tareas ... porque el tiempo va muy a prisas y cuando nos damos cuento han pasados años y no hemos avanzados gran cosa entonces lo que ellos me han aportado y el hecho de que ellos están aquí y me visiten me iba y me motiva. - Mireles, Santa Cruz Huitzizilapan, Estado de México
Cerrando la brecha entre las militancias y el trabajo pago
Los retos que enfrentamos al formar parte de una organización como el CICC son grandes y requieren mucha reflexión y construcción colectiva. Nuestra forma de trabajo nos coloca más allá de los límites establecidos por relaciones laborales que se definen al interior de las ONGs debido a una estructura regida por normas legales que dan personería jurídica. En este sentido, hemos conceptualizado que como equipo de trabajo respondemos a dos estructuras imbricadas y hasta ahora no del todo delimitadas. Por un lado la organización político/militante, la cual se sostiene gracias al activismo, voluntariado y militancia de las personas que transitan por el CICC, que se mantienen por tiempos más largos y por quienes hemos asumido este espacio como nuestro territorio de lucha y construcción de autonomía y vida digna. Por otro lado está la estructura laboral con trabajo pagado, la cual ha ido adquiriendo forma a partir del nacimiento y expansión de las áreas de colaboración de la organización.
Estamos en un camino de aprendizaje y de construcción de estrategias que nos permita compaginar ambos ritmos de interacción. Actualmente contamos con dos estructuras que operan de forma paralela. La dirección política de la organización está a cargo de una Coordinación General conformada por las y los compañeros que han pronunciado abiertamente su interés de participar en los asuntos políticos y que han demostrado un compromiso, más allá del discurso, por el trabajo comunitario. Las tareas asignadas en la coordinación no son remuneradas aunque quienes participan pueden recibir alguna remuneración económica si están involucradxs en actividades operativas de proyectos con presupuesto asignado. La coordinación juega un papel fundamental en los proceso de resolución de conflictos, de interacción con otras organizaciones del movimiento social y de formación política al interior de la organización.
El incremento de la carga de trabajo nos ha llevado a construir una estructura operativa que constituye el organigrama de la organización. Esta estructura está encabezada por la Dirección General, las Direcciones de Area, las Coordinaciones de Proyecto y las y los facilitadores. Las decisiones se toman deforma jerárquica tomando como brújula los objetivos de cada proyecto con presupuesto asignado y el plan de acción para el fortalecimiento institucional de la organización. Las pautas que determinan los organismos financiadores tienen una consideración primordial desde este espacio a diferencia de la coordinación general, la cual se guía a partir el pulso político del movimiento social y los análisis que se realizan de manera permanente con las organizaciones que acompañamos.
Para ser parte de la coordinación no se requiere ocupar un puesto directivo dentro de la estructura, pero es deseable que quienes tengan un puesto directivo, formen parte de la coordinación. La necesidad de contar con profesionales de las áreas de la gestión y administración de proyectos, nos ha llevado en algunos momentos, a contratar a personas no militantes para ocupar puestos de coordinación de proyectos, lo cual hasta el momento no ha generado buenos resultados, pues rápidamente se expresa una brecha entre el grado de compromiso que requieren los procesos que acompañamos y el compromiso meramente laboral. De igual forma, se ha visto afectada la relación con las y los compañeros de base, pues pasa de convertirse de un acompañamiento de fortalecimiento de procesos entre compañerxs, a un trabajo asistencial para poblaciones vulnerables.
Hasta ahorita tenemos más preguntas que respuestas. ¿Cómo mantener relaciones laborales sin perder la esencia de la organización? ¿Cómo articular las militancias y el trabajo pago sin generar desigualdades en cuanto a tiempo de dedicación? Ante el espectro de participaciones, ¿qué hacemos con las expectativas dichas y no dichas? ¿Cómo manejamos los sentipensares que se generan en torno a compañeras y compañeros que reciben pago por un trabajo similar al que realiza alguien más que no lo recibe? ¿Las dos formas de trabajo tienen el mismo valor?
Para algunos de nosotrxs, la solidaridad y la militancia son una relación que no tiene límites, no concuerda con horarios laborales o perfiles profesionales, va mucho más allá de lo que puede decir un contrato. Creemos que este es el camino para la construcción de otros mundos, y por ello experimentamos cada día en cada proyecto, formas de hacer de esta labor, un medio de vida. Hemos tenido algunos logros. Identificamos que hacia adentro, como con nuestras compañeras y compañeros de las comunidades, la principal estrategia es la organización y la palabra. Empezamos a definir y establecer de manera clara nuestros espacios de interlocución, de toma de decisiones y aún nos falta de resolución de conflictos. Estamos avanzando en construir una imágen que proyecte lo que practicamos y que sea clara y comprensible para todo el equipo de integrantes y hacia afuera.
Sabemos que el diálogo al interior de la organización es fundamental para poder construir estos pisos comunes y conocer las inquietudes de quienes andamos en este camino. Las y los compañeros de las comunidades son expertos, es nuestra tarea aprender de ello.
Agradecimientos
A los pueblos del sur global que luchan y resisten con alegre rebeldía.
Notas
1 https://enlacezapatista.ezln.org.mx/ el sitio oficial del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional en el cual se publican todas las declaraciones y comunicados hechos por las Juntas de Buen Gobierno de las comunidades bases de apoyo zapatistas, el Congreso Nacional Indígena (CINI) y del Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (CCRI-CG del EZLN). A lo largo del artículo retomamos algunas citas de esta fuente ya que sus textos representan la palabra directa del movimiento autonomista indígena en México.
2 Camacho, Z “Guerrero: 28 feminicidios sólo en el mes pasado”, 2018. Disponible en: https://contralinea.com.mx/opinion/guerrero-28-feminicidios-solo-mes-pasado/
3 Inclán, M. “El movimiento zapatista y la transición democrática en México”, 2018. Disponible en: https://www.cide.edu/blogs/investigaciones/el-movimiento-zapatista-y-la-transicion-democratica-en-mexico/
4 Zibechi, R. “Las autonomías indígenas se están convirtiendo en alternativas de vida y enreferencias políticas”, 2022. Disponible en: https://www.cua.uam.mx/news/miscelanea/las-autonomias-indigenas-se-estan-convirtiendo-en-alternativas-de-vida-y-en-referencias-politicas
5 Zibechi, ‘Las autonomías indígenas’, 2022.
6 Ramírez, E. “México: 69.5 % de la población indígena sobrevive en la pobreza”, 2021. Disponible en: https://contralinea.com.mx/interno/semana/mexico-69-5-de-la-poblacion-indigena-sobrevive-en-la-pobreza/
7 EZLN “Primera Parte: UNA DECLARACIÓN ... POR LA VIDA”, 2021. Disponible en: https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2021/01/01/primera-parte-una-declaracion-por-la-vida/
8 Armando Bartra, ‘Crisis civilizatoria’ in Crisis civilizatoria y superación del capitalismo, ed. R. Ornelas (Mexico: UNAM, 2013): 25–71.
9 Subcomandante Insurgente Marcos, “Durito y una de Grietas ... y Graffitis.”, 2003. Disponible en: https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2003/04/12/durito-y-una-de-grietas-y-graffitis/
10 SupGaleano, “El Muro y la Grieta. Primer Apunte sobre el Método Zapatista.”, 2015. Disponible en: https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2015/05/03/el-muro-y-la-grieta-primer-apunte-sobre-el-metodo-zapatista-supgaleano-3-de-mayo/
11 A. Bartra, A. E. Ceceña, G. Esteva, and J. Holloway, Crisis civilizatoria y superación del capitalismo, (Mexico: UNAM, 2013).
12 Holloway, J. “Agrietar el capitalismo: el hacer contra el trabajo”, 2011, 1a. ed., Buenos Aires:Herramienta, 2011.
13 Holloway, J. “¡Revolución, ahora! Contra y más allá del capital” 2013, en Ornelas Bernal, R.,Bartra, A., Ceceña Martorella, A. E., Esteva, G., & Holloway, J. (2013). Crisis civilizatoria ysuperación del capitalismo.
14 Subcomandante Insurgente Moisés and Subcomandante Insurgente Galeano, ‘The CompARTE Festival and Solidarity’, Enlace Zapatista, 8 July 2016, https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2016/07/08/the-comparte-festival-and-solidarity/.
15 Subcomandante Insurgente Galeano, ‘The Arts, the Sciences, the Originary Peoples and the Basements of the World,’ Enlace Zapatista, 4 March 2016, https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2016/03/04/the-arts-the-sciences-the-originary-peoples-and-the-basements-of-the-world/
16 Radio Zapatista ‘Sexto aniversario de Radio Tlanixco, Manantial de Liberdad’, 2022, https://radiozapatista.org/?p=42349
17 Naciones Unidas, ‘La ONU denuncia la criminilización de defensores indígenas en Mexico’, 2018. https://news.un.org/es/story/2018/10/1444692
18 Movimiento por la Libertad de los Defensores del Agua de Tlanixco ‘PRONUNCIAMIENTO CNI’, 2016. https://radiozapatista.org/?p=16234&lang=en
19 Galeano, ‘The Arts, the Sciences, the Originary Peoples and the Basements of the World’, 2016.
20 Nota del autor: Nos referimos a las cooperativas como Nidos Culturales. El nombre hace referencia a la idea de un huevo (idea o potencia creativa) que se convertirá en un ave si es “incubada” o si recibe apoyo a través de un proceso de acompañamiento. Este término fue creado por el CICC especialmente para el desarrollo de este proyecto y está inspirado en la metodología “Nidos de lenguas” utilizada en diversos países alrededor del mundo en proyectos de revitalización lingüística.